Fiesta de la Purificación de la Virgen

Fuente: FSSPX Actualidad

La fecha corresponde a los cuarenta días después del nacimiento de un hijo varón, según las prescripciones de la Ley Mosaica.

La Madre de Dios acude al Templo de Jerusalén para ofrecer el sacrificio prescrito, cuarenta días después de Navidad. La acompañan San José y el Niño Jesús.

La procesión de la Candelaria, donde el cirio simboliza a Jesús, la Luz del mundo, recuerda el viaje de María y José yendo al Templo para presentar al Mesías, el Salvador prometido.

El mismo que el anciano Simeón toma en brazos mientras profetiza:

“Ahora, Señor, puedes dejar ir a tu siervo en paz, según tu palabra. Porque han visto mis ojos tu salvación, el Salvador que has preparado en presencia de todos los pueblos. Luz para alumbrar a las naciones y gloria de tu pueblo Israel" (Lc 2, 29-32).

"El anciano llevaba al Niño, pero el Niño guiaba al anciano. Lo dio a luz una Virgen, y después de este nacimiento permaneció virgen: Aquel a quien había dado a luz, ella adoraba". (Vísperas)