Nuestra Señora de la Fuente en Caravaggio

Fuente: FSSPX Actualidad

Junto a la selección de grandes textos sobre la Virgen María, FSSPX.Actualidad invita a nuestros lectores a descubrir algunos santuarios dedicados a ella, que muestran el honor que los pueblos rinden a Nuestra Señora. Muy a menudo estos santuarios se asocian a una historia de gracias que conviene descubrir para aumentar y renovar el amor a nuestra buena Madre del Cielo.

Este primer paso nos llevará al Santuario de Nuestra Señora de la Fuente (Santa Maria del Fonte) ubicado en Caravaggio, en la provincia de Bérgamo, Lombardía, al norte de Italia, cerca de Milán.

Situación histórica

Desde el año 1431, se había intensificado la guerra entre la República de Venecia y el Ducado de Milán que luchaban por obtener los territorios de la Gera d’Adda -región de la llanura lombarda situada entre el río Adda al oeste, el río Serio al este, y Bérgamo al norte. La ciudad de Caravaggio fue un punto de unión crucial durante muchos años a lo largo del siglo XV.

Entre 1432 y 1441, y luego entre 1448 y 1453, Caravaggio estuvo alternativamente bajo el dominio de Milán y Venecia, y fue escenario de batallas, treguas y negociaciones de "capítulos" en ambos lados que permitieron la supervivencia de sus habitantes. La paz era precaria.

La aparición

El 26 de mayo de 1432, a las cinco de la tarde, una mujer llamada Juanita (Gianetta), de Caravaggio, de 32 años, casada con Francesco Varoli -un hombre iracundo y violento- “conocida por todos por su conducta virtuosa, su piedad cristiana, su vida sinceramente honesta” había salido del pueblo, para traer hierba para sus yeguas. Tenía el corazón lleno de tristeza, porque acababa de ser golpeada por su marido.

Fue entonces cuando una gran luz la deslumbró y vio bajar de lo alto y ponerse de pie junto a ella a una Señora hermosa y admirable, majestuosa, de rostro agraciado, de aspecto venerable y belleza inimaginable, ataviada con un vestido azul y la cabeza cubierta con un velo blanco.

Impresionada, Juanita exclamó: “¡Virgen María!” Fue entonces cuando la Virgen le dijo que su esposo iba a cambiar de comportamiento y le pidió tres cosas.

Primero, que dijera a todos los hombres que ayunaran a pan y agua los viernes, y que dedicaran la tarde del sábado a la oración, en agradecimiento por los muchos y grandes favores obtenidos por intercesión de la Virgen con su divino Hijo.

Además, la Virgen le encomendó a Juanita la tarea de convencer a los venecianos y milaneses de hacer las paces. Finalmente, debía pedir el fin de las divisiones en la Iglesia, en particular pedir a los orientales que volvieran a la unidad. Para confirmar esta aparición, la Virgen hizo brotar una fuente milagrosa en el lugar donde se encontraba parada.

Confirmación

Los enfermos acudían a la fuente y eran curados de sus males. Rápidamente se difundió la noticia del poder ejercido por Dios en este lugar por intercesión de la Virgen María.

El obispo de Cremona, monseñor Cesare Speciano, confirmó la autenticidad de la aparición y exhortó a los fieles a cumplir con los pedidos de oración y penitencia formulados por la Virgen. Además, pidió la construcción de un santuario.

La vidente se reunió con Marc Secco, señor de Caravaggio, Philippe Marie Visconti, duque de Milán, y el dux Francesco Foscari. En 1433, firmaron la paz, una paz que era solo relativa.

La tradición cuenta que un cántaro de agua del manantial milagroso fue llevada al emperador bizantino Juan VIII Paleológo y tuvieron lugar varias curaciones. Lo cierto es que el emperador, ciertamente por razones más políticas que religiosas, acudió al Concilio de Florencia y firmó la unión de los griegos cismáticos con el papado en 1439.

El santuario actual fue construido por San Carlos Borromeo durante el siglo XVI y sustituyó a un primer edificio religioso construido en el siglo XV. La inmigración italiana convirtió el culto a Santa Maria del Fonte en objeto de devoción en muchos otros lugares, especialmente en Farroupilla, en el estado brasileño de Rio Grande do Sul, donde se encuentra el mayor templo mariano dedicado a ella. También existe otro santuario en Tisno, Croacia.